lunes, 27 de octubre de 2008

Mitja Marató de EL Vendrell

Pues eso, este finde hice esta Mitja, preparatoria, me la tomé como un entreno fuertecillo y me salió bastante bien todo y un flato persistente unido a mi dolor de rodilla.
Me encontré a un compañero del Insituto, Miquel Davia, que parece ser que también se ha aficcionado a correr, y que después de correr una cursa paralela de 5kms me hizo unas fotos en la llegada. 
Tiempo: 1h22m35s Puesto 36º

Más sobre maratón.

Aprovecho que estoy totalmente enfrascado en la preparación de una nueva maratón para poner unas cuantas chorradas curiosas más sobre esta carrera.
La actual mejor marca mundial masculina está en poder de Haile Gebrselassie, con 2:03:59, conseguida en Berlin el 28 de septiembre este año; Y la femenina es de 2:15:25, conseguida por Paula Radcliffe, en Londres el 13 de abril de 2003. Se trata de dos marcas verdaderamente notables, teniendo en cuenta que sus seguidores en el ranking se encuentran a 1 y 3 minutos respectivamente. ¿Qué significan esas marcas? Veamos. Tomando como refencia el caso masculino, correr 42,195 km en 2:03:59, supone hacer cada kilómetro en menos de 3 minutos (barrera psicológica que se creia infranqueable). El primero en romper esa barrera fue el brasileño Ronaldo Da Costael 20 de septiembre de 1998, con 2:06:05, a 2:59 el km. Gebrselassi estableció su marca corriendo a 2:55 el km. A qué equivale ese tiempo? Pues a correr a más de 20 kilometros por hora. ¿Les parece poco? Les propongo un reto: 3 minutos el kilómetro supone hacer cada 100 metros en 18 segundos. Prueben a correr esa distancia en 18 segundos; lo que para cualquiera sería un sprint de velocidad es el ritmo que los maratonianos mantienen durante los siguientes 420 hectómetros.  Para un atleta popular bien entrenado ese ritmo es prácticamente imposible de mantener más de un kilómetro. ¿A que en la tele parece que van “parados”?  El caso fenenino no es menos impresionante si entendemos las lógicas deferencias fisiológicas en varón y mujer.  “El muro”. El nombre es bastante explícito. Hay un momento en el transcurso de la carrera en el que se traspasa el umbral de la resistencia, del entrenamiento… y se entra en el terreno de lo desconocido, terreno en el que ni el mismo atleta sabe qué va a pasar o cómo va a responder su cuerpo.  Suele manifestarse a partir del kilómetro 30 y el 35. Es ese momento en el que se deciden la mayoría de las maratones. El atleta que es capaz de sobreponerse a ese momento “delicado”, o le afecta en menor medida, es el que va descolgando a todos sus rivales, que ya no pueden mantener el ritmo.  Es la obsesión de todo maratoniano. Cuando corres tu primera maratón, en el km 30 piensas que la carrera ya está terminada. Cuado corres la segunda, sabes que la carrera empieza de verdad en el km 30.